Manuel Vilas (Barbastro 1962) clausuró el ciclo literario Lunes de Otoño impulsado por Fundación Caja Rural de Aragón. Durante un mes los libros han sido protagonistas en las conversaciones en torno a ellos con los también escritores José Luis Corral y Alejandro Corral como conductores.
Un viaje en el que las más de quinientas personas que han participado en él han podido descubrir el lado más humano y cercano de los escritores y escritoras que han desfilado por Lunes de Otoño, en el histórico Salón de Columnas del Edificio Caja Rural de Aragón de Zaragoza.
El escritor altoaragonés, finalista del Premio Planeta en 2019 habló sobre su pasión con la música “con el rock and roll, que fue mi educación sentimental en los años 70, Bob Dylan, Lou Reed y Springsteen, todos son hijos suyos. Me daba consuelo y auxilio ver que había una afirmación de la vida a través de la poesía que fuese popular”.
Sobre su gran éxito literario, Ordesa, explicó que “el coche de mi padre y los cuidados que le dispensaba eran toda una liturgia. Amaba más al coche que a cualquier cosa. En algún lugar de playa en el que pasamos las vacaciones durante la infancia, en la zona de aparcamiento no había más que dos árboles de escasa frondosidad. Mi padre obligaba a la familia a levantarse al amanecer para poder aparcar el coche junto a los arbolitos y que estuviera a la sombra cuando el sol comenzara a pegar”. Lo terrible, confiesa Vilas hijo, es que con los años él hace lo mismo con el suyo.